Si al otro lado, subiendo hacia el monte Ezkaba, queda la cabeza del Boulevard de Anelier, esto propiamente debe ser el culo si atendemos a la cantidad de mierda que acumula. Tiene todo el aspecto de que un buen día los obreros que estaban dispuestos a acometer la obra de un nuevo edificio de viviendas, que debía cerrar la manzana, echaron a correr para no volver nunca más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario